domingo, 16 de febrero de 2014

10. Special Picnic

Ya era por la mañana y me había despertado Lucia, con la que compartía habitación, muy ilusionada.
-Te tengo que contar lo que me pasó anoche.
-Ajá- dije medio dormida.
-Pues mira, te cuento. Como por las doce de la mañana me levante y fui a la cocina porque tenia sed y me encontré a Louis que volvía del baño. Entonces él me dijo que le siguiera y lo hice. Me llevó a la parte de atrás de la casa que tiene un jardín precioso y estuvimos toda la noche abrazados viendo las estrellas. Todo fue muy romántico, hasta que él se quedo dormido encima de mi pero le desperté de un grito, bueno en realidad no grité demasiado alto, y cuando se despertó fue muy gracioso porque se levantó de repente y se cayó al suelo. Bueno... y eso es todo.- dijo mi amiga-. Lucia? Lucia!!! Has escuchado algo de lo que te he dicho? Te has vuelto a dormir? Ahora te lo tendré que explicar otra vez...
 

-¡No!- dije-, por favor.
-Ahh asi que ahora si que estas despierta ehh... Que morro tienes.
-Ya ves- contesté- pero no hace falta que me lo cuentes todo otra vez, te he escuchado y me alegro mucho por ti.
-Que pelota eres, venga vamos a desayunar- dijo mientras tiraba de mi y me levantaba de la cama.
-Espera, primero tendremos que vestirnos, no?
-Cierto, cierto...- dijo Lucia despistada.

Salimos al pasillo y allí estaba Liam.
-Yo voy yendo a abajo- dijo Lucia discretamente.
-Ahora vamos- dijo Liam. Me sonrió y yo al él.
Me cogió de la mano y me guió al exterior de la casa, al jardín de atrás. Era tan grande como Lucia había dicho y tan hermoso... Pero fuimos para ver el jardín, sino que salimos por una puerta que daba a la calle.
-¿A dónde vamos?- pregunté.
-Ahora lo veras.- Me respondió y siguió en marcha. Después de un corto silencio volvió a decir.- Cierra los ojos.
Los cerré como él dijo y seguimos andando, yo tropezándome con cada cosa que cruzaba, pero siempre segura porque el me agarraba. Abrí los ojos y nos encontramos en un gran parque verde, parecido al que había en mi pueblo, solo que este si tenia lago. Al lado de un árbol había un pequeño mantel en el suelo con una cesta encima. Le miré a los ojos tiernamente y el me respondió abrazándome y besando mi mejilla.

-No tenias por qué...-empecé a decir.
-No, no tenía. Pero quería.
Le volví a mirar y esta vez le besé.
-¿No nos estarán esperando los demás?- pregunté.
-¿Es eso lo que mas te importa ahora?- dijo decepcionado.
-No no, es solo que... Da igual- Le miré y sonreí.

Acabamos de desayunar. Me dio un abrazo y acto seguido me cogió en volandas. Corrió. Se paró justo a la orilla del lago durante unos segundos y siguió corriendo como un loco. Cuando el agua ya le llegaba poco mas arriba de la cintura me volvió a besar y me dejó caer al agua, luego el se zambulló.
-Mierda!- dije enfadada.
-¿Que pasa?- preguntó.
-¿Te acuerdas cuando me tiraste a la piscina hace unos días atrás?
-Si- dijo.
-Pues que ese día llevaba el móvil en el bolsillo y se estropeó. Entonces cuando vine aquí me compre uno nuevo, y adivina...
-Oops- dijo entre risas.- Te compraré uno nuevo.
-No, no hace falta, con que la próxima vez que lo hagas avises me basta.
-Pues me parece que eso va a se difícil.

Volvimos a casa para cambiarnos de ropa. Entramos por la puerta trasera para que nadie se diese cuenta de nuestra escapada entonces...
-Hola chicos!!- acabábamos de entrar en la cocina, que pensábamos que estaba vacía, pero no, ahí estaba Harry.- ¿De donde venís tan mojados?
-Larga historia- dijo Liam mirándome y riéndose a la vez-. Bueno en realidad no tanto...
-Pues entonces contármela.
-Luego- dije.
-Joliiin!!- dijo Harry enfurruñado y se cruzo de brazos imitando a un niño pequeño.

Nos cambiamos de ropa y ya era casi la hora de comer así que Niall propuso que fuésemos a Nando's, su restaurante favorito.
-¿Que quieren de comer?- dijo la camarera.
-Niall, te dejo que elijas por mi- le dije.
-Y por mi- dijo Lucía- Que tu ya te conoces el restaurante y sus especialidades.
-Vale-dijo-. pues tráiganos...